Para facilitar el obtener éxito en un proyecto comercial existen habilidades empresariales de un emprendedor que deben ser desarrolladas y fortalecidas.
Una forma rápida de mejorar es estar con personas que son como nosotros quisiéramos ser.
Fijarse en los grandes emprendedores exitosos y conocer sus habilidades empresariales hace posible trabajar en esa dirección imitando esas buenas cualidades, para maximizar las oportunidades de negocios y poder hacer crecer un proyecto o emprendimiento.
Habilidades de dirección más importantes para conducir una empresa
1 Tener iniciativa
La iniciativa es verdaderamente la piedra angular de un emprendimiento.
Sin ella sería prácticamente imposible dar inicio a un proyecto propio y sacarlo adelante.
Viene a ser la capacidad para iniciar y ejecutar acciones de negocio, poder crear oportunidades e ir perfeccionando los resultados, mediante una motivación intrínseca que ayuda al desarrollo de otras habilidades dentro del rubro empresarial, como la autoconfianza y la responsabilidad.
La iniciativa suele proveer la fuerza necesaria cuando se presenten dificultades y posibilita buscar soluciones nuevas.
2 Ganas de superación
La mayor motivación que poseen muchos empresarios exitosos es retarse a sí mismos. También está el hecho de querer seguir aprendiendo algo nuevo todos los días.
Es innegable el continuo cambio del mercado, así como también de las necesidades de los consumidores.
Debido a estos factores, es necesarios que todo emprendedor posea una curiosidad innata que sirva para motivarlos y encaminarlos hacia el aprendizaje y la superación.
Quienes tienen verdadera vocación de emprendedor siempre están a la caza de retos nuevos y formas para mejorar sus productos o servicios.
De este modo llegan a descubrir nuevos nichos, atinan a abrir nuevas líneas de comercio y logran expandirse.
3 Ser intuitivo
En el mundo del emprendimiento, la intuición es un elemento al que se le debe mucho.
La intuición puede entenderse como aquella habilidad que permite anticiparse al futuro y prever las tendencias.
Es interesante el hecho de que el concepto de inteligencia intuitiva del sociólogo Malcolm Gladwell esté ganando terreno. Es más, hay cada vez más estudios que demuestran su importancia.
Una investigación que se realizó en una universidad sueca, con 200 directivos, demuestra que el estilo intuitivo, creativo e innovador de toma de decisiones tiene relación con una mayor eficacia organizacional que se debe a un rol directivo más eficiente.
4 Saber controlarse emocionalmente
Que los emprendedores sepan dejarse guiar por la intuición no quiere decir que sean personas que suelan dejarse arrastrar por sus emociones.
Saber sopesar de forma racional las ventajas y desventajas de las diversas opciones que van surgiendo constituye una de las habilidades directivas más preciadas.
Un emprendedor exitoso generalmente ha logrado desarrollar un auto dominio emocional adecuado y no acostumbran tomar decisiones dejándose llevar únicamente por un estado eufórico o uno de desgano.
Esa característica de su personalidad también les ayuda a desempeñarse eficazmente en situaciones estresantes o de tensión.
Además, hace que se conviertan en hábiles negociadores, ya que los capacita no sólo en la gestión de sus propias emociones, sino también en las ajenas.
5 Lograr ser resiliente
Según palabras de Henry Ford, fundador y dueño de la famosa marca de vehículos, el fracaso es sólo la oportunidad de comenzar de nuevo de forma más inteligente.
Existe una habilidad dentro del mundo empresarial que resulta de suma importancia y es la capacidad de superar los fracasos y proseguir por el camino hasta llegar al éxito.
Hay muchos emprendedores, la mayoría, que han fracasado en varias oportunidades antes de lograr establecer un negocio exitoso.
Sin embargo, han sabido aprender de cada experiencia y ello les ha servido para fortalecerse y evitar volver a cometer las mismas equivocaciones.
6 Saber ser flexible
Si la flexibilidad siempre fue un atributo muy importante para un empresario, hoy lo es aún más debido a los cambios vertiginosos que ocurren en la actualidad.
La flexibilidad permite adaptarse a los cambios con mayor facilidad; también, modificar la hoja de ruta, de ser necesario; brinda libertad para explorar nuevos mercados, abrir nuevas líneas y cerrar otras que no rinden los resultados esperados.
Un emprendedor puede ceñirse a una buena idea de negocio, pero debe ser todo lo necesariamente flexible como para hacer cambios en la manera de llevarla a la práctica.
7 Ser tolerante ante la incertidumbre
A menudo los emprendedores se ven obligados a tomar decisiones importantes en entornos donde reina una gran incertidumbre.
No siempre es posible conocer todos los datos o estos pueden variar con rapidez, por lo que resulta inevitable tener que asumir ciertos niveles de riesgo, pero se requiere de una buena dosis de serenidad para poder sopesarlo.
Con frecuencia, lo que marca la diferencia entre el éxito y el fracaso es la habilidad para tomar decisiones en entornos donde prevalece el caos y con información fragmentada; incluso, cuando todos lo demás se detienen.
8 Saber persuadir
Toda buena idea requiere ser vendida.
Por este motivo, una de las habilidades empresariales básicas se relaciona directamente con la comunicación.
Un emprendedor debe tener la capacidad de despertar el entusiasmo de los demás con su proyecto, transmitiendo de forma adecuada su visión y, ante todo, persuadirles de que lo acompañen en la aventura que desea iniciar.
9 Ser líder
Los proyectos, sean grandes o no tan grandes, requieren contar con el equipo adecuado para ser llevados a la realidad.
Por este motivo, los emprendedores no pueden descuidar sus habilidades para ejercer liderazgo.
La función de un buen líder no es sólo saber guiar al grupo, sino que también debe poseer la capacidad de contagiar su entusiasmo a los demás miembros e inspirarlos con su ejemplo.
Un líder efectivo se compromete con los problemas y sabe explotar positivamente las potencialidades de cada integrante del grupo para conseguir el mejor desempeño.
10 Confiar en sí mismo
Según palabras de Walt Disney, “Todos tus sueños pueden hacerse realidad si tienes el coraje de perseguirlos.”
Un emprendedor requiere de mucha confianza, más aún si se inclina por la exploración de nuevos mercados, dar lugar a nuevas líneas de negocio o crear nuevos productos o servicios.
En el comienzo, suele ocurrir que los demás no entienden su visión, la confianza es lo que hace posible que persevere y no pierda el rumbo.
Conclusión
Ser emprendedor no resulta fácil, pero las habilidades y características anteriormente descritas ayudarán al empresario a que el camino al éxito sea menos inseguro.