Antes de hacer un emprendimiento a través de una tienda online es necesario conocer sobre el tema. En este artículo te contamos lo que debes saber acerca del ecommerce.
El ecommerce, como modelo de negocio, resulta interesante para los dueños de comercios que también deseen trabajar vía online o cambiar su negocio físico por uno electrónico.
Ciertos estudios indican que el crecimiento anual del ecommerce es de alrededor del 23 por ciento.
Se sabe que en América Latina el crecimiento del comercio electrónico es de aproximadamente un 10 por ciento; no obstante esa cifra puede subir hasta un 64 por ciento.
América Latina es una de las regiones que reporta un mayor crecimiento en el mundo en cuanto a comercio electrónico.
Delante de la región latinoamericana se encuentra sólo Asia-Pacífico.
Entonces, se puede observar que el cambio en los hábitos ha favorecido al ecommerce como una muy buena opción para aquellos que deseen establecer un negocio propio y a la vez aprovechar la flexibilidad propiciada por el mercado digital.
No obstante, se requiere saber claramente lo que es un ecommerce, cómo crear uno y saber diferenciarse de otras tiendas virtuales.
¿Qué es un ecommerce?
La palabra ecommerce está formada por dos vocablos de la lengua inglesa: electronic commerce.
Básicamente se refiere al comercio que se efectúa por vía online.
Este tipo de negocio se ha hecho más fuerte en los últimos años, debido a que los consumidores se han dado cuenta de que internet es un entorno seguro para hacer compras.
Resulta imprescindible aclarar que todo ecommerce es una tienda online, sin embargo, no toda tienda online es un ecommerce.
También existen otros modelos de ecommerce, como por ejemplo el Marketplace.
Para aclarar el término, una tienda online sólo se considera un ecommerce cuando comercializa productos de una sola empresa como por ejemplo Forever 21.
Eligiendo entre un ecommerce o Marketplace
El marketplace se diferencia del ecommerce porque cumple la función de un escaparate virtual de varias empresas diferentes.
En este caso, los productos ofrecidos no pertenecen a la misma tienda, sino que solamente son mostrados en la misma plataforma.
El Marketplace realiza la intermediación en el pago, pero no se hace cargo de la entrega del producto o de brindar la garantía.
Este modelo suele funcionar bien para muchos emprendedores, debido a que no es necesario comprar un dominio y afrontar otros costos que son parte de la creación de un ecommerce.
Lo que hay que hacer es únicamente subir los productos en la plataforma elegida y luego promocionarlos.
Vender en un Marketplace tiene la ventaja adicional de que se usa la autoridad que la empresa ya posee dentro del mercado a fin de atraer compradores.
Esto hace que resulte bastante más sencillo para que la gente encuentre el ecommerce.
Alguien que desee adquirir calzado u otra indumentaria tendrá muchas más facilidades en encontrar una tienda virtual de nombre reconocido cuando esté realizando una búsqueda, que la tienda de un nuevo emprendedor.
Una desventaja al vender de esta manera consiste en que no se tiene autonomía para definir la manera en que el producto será mostrado a los compradores.
Dentro de este contexto, el marketplace se convierte en la mejor opción para quienes venden productos genéricos, ya que pueden evitar la competencia y el trabajo que conlleva crear un dominio propio.
Por otra parte, el ecommerce brinda ciertas ventajas a los que ofrecen productos de nicho y quieren comunicarse con una audiencia más segmentada.
No obstante, no hay impedimento en tener un producto de nicho y venderlo en un mercado.
El modelo de comercio online a elegir va a depender de la cantidad de dinero que se esté dispuesto a invertir.
¿Qué tipos de ecommerce existen?
Hay diversos modelos de negocio orientados a aquellos que aspiran a trabajar realizando comercio online.
Y es válido para quienes desean hacerlo efectivo mediante ecommerce como también para los que eligen por hacer la exhibición de sus productos en un Marketplace.
Mencionaremos los tipos de ecommerce:
1 Business to Business – B2B
Esta sigla, B2B, originada en idioma inglés de la frase Business to Business, es aplicable a las empresas que montan comercios electrónicos para vender productos a otras empresas.
Usualmente es usado para comercializar materias primas, como por ejemplo una tienda de piezas para automóviles.
2 Business to Consumer – B2C
Se llama B2C al modelo que adoptan las empresas que venden productos destinados al consumidor final.
Este tipo agrupa a la mayoría de comercios electrónicos.
El ecommerce de marcas como las que venden indumentaria deportiva son ejemplos de este tipo.
3 Consumer to Business – C2B
Esto consiste en una inversión del modelo de negocio tradicional.
Aquí, el consumidor pone sus servicios a disposición de las empresas.
Un ejemplo son las páginas web donde los freelancers publican los servicios que ofrecen.
4 Consumer to Consumer – C2C
El C2C abarca las relaciones efectuadas entre los propios consumidores.
Esto se da en los foros y los mercados como Ebay y Mercado Libre por citar ejemplos.
¿Qué ventajas brinda el tener un ecommerce?
Ahora mencionaremos las ventajas que se derivan de tener una tienda virtual en la que ofrecer tus productos:
1 Horarios flexibles
El comercio electrónico facilita el equilibrio entre poseer un negocio propio y disponer de mayor cantidad de tiempo.
Con esto nos referimos a que es posible crear un negocio virtual trabajando con comodidad desde la propia casa.
Con ello se puede evitar el tránsito al ir y venir al trabajo y otros inconvenientes que le son conocidos a quienes son dueños de un negocio físico.
2 Mayor autonomía
Al crear un ecommerce existe mayor libertad para decidir qué diseño es el más adecuado para mostrar el producto y está más acorde al público objetivo.
Además, con esta forma de vender no es necesario pagar comisiones a terceros.
3 Menor inversión
Tener un negocio online tiene la ventaja de que no hay que incurrir en gastos habituales de luz, alquiler y remuneraciones de personal.
Al comienzo solamente se necesita comprar un dominio y contratar un servidor de alojamiento.
Para ello existen planes anuales bastante asequibles.
Para la estructura de la tienda virtual en sí, existen diversas plantillas listas y de las que se puede disponer en internet.
El beneficio de estas plantillas es que no habrán costos de diseño y programación, pero siempre y cuando se halla elegido la herramienta correcta.
Además, existen varias plantillas listas para tu tienda disponibles en Internet, lo que significa que no tendrás costes de programación y diseño, siempre y cuando elijas la herramienta correcta, claro.
4 Ventas escalables
Cuando se realiza una venta en una tienda física requiere un tiempo para llegar a la persona.
Para acompañarla mientras evalúa los productos, mostrarle sus ventajas.
Y como paso final, efectuar el pago.
En una tienda online, el proceso de compra tiene mayor dinamismo y se pueden llevar a cabo varias ventas partiendo de un mismo anuncio.
Inclusive, es posible hacer varias ventas de manera simultánea.
Si se trata de productos físicos, cuanto mayor número de ventas se desee hacer, mayor será la inversión requerida a fin de definir una acción.
No obstante, si se decide vender productos digitales, se pueden generar ganancias mientras el acceso esté disponible.
¿Existen desventajas al tener un ecommerce?
Al igual que en cualquier otro tipo de negocio, tener un ecommerce también conlleva sus desventajas.
Estas desventajas se manifiestan sobre todo al tratarse de productos físicos.
Es esencial sopesar las ventajas y desventajas. Ello hará posible dilucidar si los pros justifican la inversión que se requiere.
En caso de que no sea así, pueden existir alternativas en otros modelos de negocios.
Entre las desventajas que podemos considerar en este artículo mencionaremos algunas:
1 Crear el stock
Disponer de un stock de productos a fin de satisfacer la demanda de los compradores es uno de los problemas esenciales de poseer un ecommerce.
Esto se debe a dos motivos:
- Es muy temprano para saber qué producto se venderá más.
- El espacio físico disponible en tu domicilio quizás resulte insuficiente para poder almacenar todo.
Sin embargo, hay que tomarlo con calma porque existen algunas alternativas para evitar este inconveniente.
Una de ellas se trata de comercializar productos a consignación.
Consiste en poner en exhibición en tu tienda productos de otras personas.
El trato sería que recibas una comisión por cada artículo que se venda.
De este modo no será necesario realizar una inversión para implementar un stock.
La otra forma sería realizar la venta de productos solamente por encargo.
Por ejemplo, en otros países existen tiendas que se dedican a diseñar zapatos a medida, tanto para varones como para mujeres.
En esta situación particular, los artículos comienzan a elaborarse solamente una vez que el comprador haya realizado el pago.
2 Altos niveles de competencia
Al analizar la posibilidad de crear su propio negocio, una persona no es la única. Hay miles de otros individuos que se han planteado la misma idea.
Debido a esta situación, la competencia es uno de los primeros aspectos a tener en cuenta antes de hacer alguna inversión de dinero para crear una tienda online.
Hay que estudiar previamente el mercado al que se pretende incursionar, con el fin de buscar y brindar soluciones verdaderamente originales y efectivas que sumen valor a la vida de los usuarios.
Aquí se debe considerar la clase de producto que se desea ofrecer, si ya existen otras tiendas online que ofrezcan algo similar, si puedes ofrecerlo mejorado.
3 Los procedimientos de entrega
Según el país de que se trate, la logística necesaria para las entregas puede ser un asunto muy engorroso para el empresario o emprendedor, debido a que podrían haber pocos servicios que se especialicen en la entrega de productos.
Es conocido que ciertos productos como flores, comida y boletos requieren entrega casi inmediata.
Mientras que otros, tales como artículos tecnológicos, calzado y vestuario, artículos para el hogar, productos eléctricos, artículos de belleza, etc. pueden demorar en llegar al usuario.
Y, por supuesto, no es deseable hacerse conocido por retrasar los pedidos de la tienda virtual.
En conclusión
El comercio online es una actividad que se ha hecho muy accesible para la mayoría gracias a la masificación de la tecnología, sobre todo en el uso de internet.
Tiene muchas ventajas, tanto para el vendedor como para el consumidor, haciendo que ambos se beneficien ya que cada uno permanece en su lugar, sin necesidad de movilizarse.
Sin embargo, no está exento de desventajas, por lo que el emprendedor deberá irse adaptando y resolviendo a medida que vaya avanzando por este camino de las ventas online.