Notamos que el internet está cada vez más presente en la vida moderna.
Es por ello que en este artículo te contaremos qué es internet de las cosas y cómo Influye en el mundo actual.
Conexión entre las cosas
La frase Internet de las Cosas es la traducción de su equivalente en inglés Internet of Things, cuyas siglas son IoT.
Se utiliza este término para describir un escenario en el cual se encuentran conectadas diversas cosas y se comunican.
Es decir, el Internet de las Cosas alude a la posibilidad de que cualquier objeto esté conectado a Internet.
Esta tecnología innovadora persigue el objetivo de conectar a internet artículos que usamos a diario.
Con ello se desea acercar cada vez más el mundo físico al digital.
Origen del término
El nacimiento del término sucedió en 1999, cuando Kevin Ashton, del Instituto Tecnológico de Massachusetts, escribió un artículo titulado ’’Las cosas de Internet de las Cosas’’.
Según su criterio, la causa que produce la necesidad de las personas de conectarse a internet de nuevas formas es la falta de tiempo que experimentan.
Estas nuevas formas de conexión a internet dan lugar a la creación de dispositivos destinados a realizar tareas que no necesitamos hacer.
Si bien en sus inicios se limitaba a computadoras, smartphones y tablets, en los últimos años ha aumentado exponencialmente el número y variedad de dispositivos conectados.
Entre éstos tenemos a grandes y pequeños electrodomésticos, bombillas, termostatos, videoconsolas o cámaras de vigilancia.
Asimismo, podríamos mencionar una lista prácticamente interminable de objetos del ámbito profesional e industrial igualmente conectados o conectables.
Ayuda en el diario vivir
Tales dispositivos se comunican o conversan dentro de la misma red mediante una variedad de protocolos.
Ellos acompañan nuestras actividades, pueden almacenar información y, en base a todo esto, funcionan para asistirnos en actividades cotidianas.
Y yendo más allá, podemos afirmar que el Internet de las Cosas abarca también a las personas.
Esto se debe a que modifica su forma de actuar y relacionarse, así como los procesos sociales, industriales y de negocios.
Y cuando se habla de cosas, podemos referirnos realmente a cualquier cosa.
Ya nos hemos acostumbrado a utilizar internet mediante las computadoras, los teléfonos inteligentes, Smart Tvs y los videojuegos.
No obstante, dentro de este ámbito, no se trata de la idea de tener otro medio más para conectarse a internet en sí.
Lo que se persigue es procurar que los dispositivos tengan cada vez más eficiencia.
También se busca contribuir en la optimización de recursos naturales, en el campo de la salud y otras innumerables oportunidades.
Grandes cantidades de datos
Por IoT, entonces, se entiende una colección ilimitada de objetos que se conectan permanentemente en un entorno digital.
Al interior de este entorno, se aspira a que todo sea inteligente mediante la gestión de grandes cantidades de información.
Dentro de este ambiente de Big Data, cuyo enfoque se dirige a a las personas en última instancia, el objetivo del IoT es centrarse tanto en una utilidad personal como social.
Por lo tanto, esta tendencia supondrá la focalización en la persona, buscando la personalización máxima.
No obstante, hay que lograrlo sin perder de vista las posibilidades que ofrece para el progreso social.
Entre otros fines, con el objeto de mejorar la gestión de las ciudades, hacerlas más habitables y sostenibles.
Además de impulsar la economía en general con nuevas oportunidades de negocio o, por ejemplo, aportando un plus de sostenibilidad.
Se trata, en suma, de un concepto trascendente, cuyo desarrollo representa la próxima evolución de Internet.
Dicha evolución resulta de gran utilidad para transformar datos emitidos a través de sensores en valiosa información.
Su utilidad tiene un gran potencial y se halla orientada a hacernos la vida más fácil gracias a un innovador manejo multidispositivo.
Así como también proporcionando datos que pueden utilizarse en aplicaciones de distinto tipo a nivel individual o agregado.
Internet de las cosas y sus variadas aplicaciones
En el entorno de la Smart City o ciudad inteligente, el IoT está empezando a cambiar la manera en la que vivimos.
Desde un enfoque de mayor amplitud, el presente y futuro del IoT dependen en gran medida de la evolución e interacciones producidas entre las piezas del rompecabezas que conforman este Big World en el que estamos viviendo.
Esto se da siempre bajo la égida de la era digital: desde el Big Data, el Big Analytics, el Data Science y el Data Governance, pongamos por caso, hasta el Internet de las cosas que nos ocupa.
Un potencial sólo aprovechable de la mejor manera haciendo frente tanto a los desafíos tecnológicos como a las necesidades y riesgos sociales que plantea esta nueva realidad.
Esta es una situación en la que la información es esencial para el progreso, además de ponernos en la palma de la mano la tan deseada moneda de oro de la economía digital.
Riesgos del internet de las cosas
El hecho de que los grandes datos sean uno de los nuevos motores de la creación de valor económico y social no debe eclipsar los posibles riesgos que también conlleva.
Entre otros, el de la eficiencia energética, un aspecto todavía no resuelto, o también el de la seguridad.
Con respecto al problema energético, su solución podría venir del paralelo desarrollo que está produciéndose en tecnologías renovables como respuesta a un mundo cada vez más cálido.
La lucha global contra el avance del cambio climático en la que está embarcado el mundo, por lo tanto, constituye un marco favorable para tal objetivo.
Será más fácil lograrlo conforme se vaya avanzando en la actual transición que supone el abandono de los combustibles fósiles en favor de una sociedad baja en carbono.
Por su parte, la seguridad es otro caballo de batalla del IoT, puesto que el impacto del IoT amenaza con atentar contra la privacidad de los datos.
El mismo boom del IoT está haciendo que los datos sean cada vez más numerosos.
Al mismo tiempo que en muchos casos se carece de tecnologías lo suficientemente seguras, entre otros factores que los convierte en vulnerables.
Y, por lo tanto, son datos especialmente susceptibles de ser hackeados.
En definitiva, habida cuenta del positivo impacto que este nuevo paradigma está teniendo y llegará a tener, probablemente sea cuestión de tiempo que éste y otros obstáculos sean salvados.
Solo así el IoT que ya está aquí podrá desarrollar todo su potencial sin suponer un impacto negativo difícil de soportar, ofreciéndonos, entonces sí, posibilidades inéditas en la historia de la humanidad.
Uso de IoT en sectores clave
Internet de las cosas viene causando un profundo impacto en gran número de industrias y diversas líneas de negocios.
Mencionaremos los tres sectores que están liderando el camino:
1 Procesos de fabricación
Internet de las cosas está muy presente en los procesos de fabricación.
En este rubro se llama Internet de las cosas industrial (IIoT) y está transformando completamente la manera en que se hacen los productos.
Los fabricantes usan IIoT y la comunicación M2M (machine to machine, o máquina a máquina) para impulsar la automatización industrial, prever y prevenir fallas de equipos, mejorar la seguridad laboral y mucho más.
2 Prestación de ciertos servicios
Philips Lighting se está convirtiendo en una empresa de sistemas y servicios, además de ser la empresa de iluminación líder en términos de IoT.
SAP Cloud Platform les proporciona una solución escalable a largo plazo para recopilar gran cantidad de datos de sus instalaciones de iluminación en todo el mundo.
3 Industria automotriz
Los fabricantes de automóviles y las empresas tecnológicas están usando IoT para ayudar a los conductores de automóviles conectados (o automóviles inteligentes) a evitar accidentes.
También a prever problemas de mantenimiento, encontrar lugares para estacionar y más.
IoT y machine learning también están trayendo los automóviles autónomos al mercado.
Conclusión
El internet de las cosas es algo que va a estar cada vez más presente en las acciones del día a día de las personas.
En paralelo a su desarrollo, será necesario fortalecer cada vez con mayor eficacia lo que concierne al aspecto de seguridad, para evitar que los datos sean vulnerados.
Con el internet de las cosas, las personas reciben la ayuda adecuada para gestionar mejor y hacer un uso más eficiente de su tiempo.